Buscando la Vitamina N de naturaleza

De todas las vitaminas que son necesarias para sentirnos bien, hay una que tenemos a nuestro alrededor y se llama naturaleza. Te invito a conocer más sobre ella en este artículo.

• ¿Cómo interactuamos con la naturaleza?
• Trastorno o Síndrome  de Déficit de Naturaleza 
• Todo comienza por las plantas
• Creando un espacio verde con sentido…s

¿Cómo interactuamos con la naturaleza?.

Te has detenido un instante a pensar ¿de qué manera te relacionas con la naturaleza? ¿qué pasa cuando no estás en un entorno que brinde la posibilidad de estar cerca de ella por espacios prolongados de tiempo?

Paradójicamente,todo lo que está a nuestro alrededor tiene un componente de la naturaleza. La silla donde nos sentamos si está hecha de madera proviene de los árboles, si es de plástico proviene de elementos como el petróleo. La computadora y el celular necesitan del oro negro denominado coltán que se explota en la República Democrática del Congo. Nuestra dieta alimenticia está basada principalmente en animales y plantas, y de las plantas también obtenemos diversos medicamentos. No olvidemos nuestras prendas de vestir que están hechas por ejemplo de algodón y seda.

Cuando hablamos de conectar no nos referimos simplemente a poner los pies en el pasto, a viajar a la playa o a las montañas; conectar es conocer lo que nos rodea y revalorizarlo.

Pero al estar en la ciudad, “ la selva de cemento”, establecemos un muro en el que constantemente perdemos el vínculo directo con la biodiversidad más cercana.

En la ciudad Autónoma de Buenos Aires conviven además de las formas de vida humanas que ya somos alrededor de 3 millones de habitantes,también las no humanas,un ejemplo de ello son las 300 especies de aves, que están distribuidas a lo largo y ancho del área metropolitana.

Algunas de las que podemos ver con mayor frecuencia son:

-Aves rapaces como los caranchos y gavilanes
-Horneros y zorzales
-Cotorras y calandrias

Encontramos pájaros carpinteros, aves nocturnas como el lechuzón orejudo, pero también convivimos con polinizadores como abejas, mariposas, polillas, murciélagos y mejor aún con marsupiales como las zarigüeyas.

Estos animales sin duda alguna son parte de lo que nos rodea pero que no “vemos”.

Todas estas especies encuentran refugio en árboles, arbustos, plazas y parques, jardines, patios o balcones. Muchas de ellas son controladoras de plagas pues se alimentan de ratas, ratones y diversidad de insectos como los mosquitos, pero también están aquellas que visitan diferentes flores para conseguir alimento y a la vez brindarnos alimentos.

Entonces ¿Por qué no las vemos?

Trastorno o Síndrome de Déficit de Naturaleza

El síndrome o trastorno de déficit de naturaleza es un término que ha sido estudiado por varios científicos pero que el periodista y escritor Richard Louv empezó a profundizarlo a partir del año 2005 y también lo destaca en sus diversos libros.

Este trastorno está directamente vinculado con la ausencia del contacto con el mundo natural y los efectos que puede generar en la salud y el bienestar humano. Esta enfermedad social, como la denomina Louv, está asociada con el exceso de tiempo que dedicamos al uso de la tecnología y que posteriormente puede derivar en manifestaciones de estrés, ansiedad, hiperactividad infantil etc.

¿Cómo podemos entonces generar un equilibrio?

Buscando la Vitamina N de naturaleza

Existen diferentes maneras para obtenerla acá te presento algunos tips:

  1. Levantar la cabeza, sí así de fácil, cada vez que salgas a la calle, a tu ventana, al balcón, la terraza o el jardín, levanta la cabeza. observa detente mira y escucha,te vas a sorprender. El cielo hace parte de la naturaleza y ofrece una amplitud en el paisaje, al levantar la cabeza y la mirada podemos ver las copas de los árboles, las aves que van y vienen, el sonido al atardecer de aquellas que buscan su refugio, o al amanecer cuando nos indican que ya es un nuevo día.
  2. Muchos investigadores sostienen que es recomendable que todos los días al despertar, la primera luz que debes buscar sea una natural, tómate 5 minutos para absorber esa energía vital que te brindan los rayos del sol, el viento y el aire que respiras.
  3. Incorpora un espacio verde acorde a las necesidades de tu entorno.
  4. Identifica las plantas que tienes en casa y pregúntate por qué las tienes, ¿sabes sus nombres? qué sensación te genera tenerlas en tu hogar?

Todo comienza por las plantas

Las redes alimentarias comienzan con las plantas, pues son los únicos organismos a excepción de algunas bacterias, que se encargan de captar la energía del sol y a su vez transformarla en alimento y nutrientes. El resto de las formas de vida como humanos y otros animales dependemos de ellas para sobrevivir de muchas maneras. La cantidad y diversidad de vegetación determinará en gran medida la cantidad de naturaleza presente en un ambiente.

En nuestro caso, al incorporar un jardín con variedad de plantas nativas es decir que son propias de la región en la que nos encontramos, permitiremos interacciones como la polinización que además de ser fundamental para muchas especies, nos brindan bienestar y salud mental.
Existen diversas maneras de recrear un espacio natural en los entornos que solemos frecuentar o pasar la mayor cantidad de horas en el día, como por ejemplo el trabajo, la casa, la escuela, la universidad etc. Cada espacio es único y será diseñado atendiendo a nuestras necesidades y las necesidades de dichos lugares, pero lo más importante que debemos tener en cuenta es poder lograr el bienestar que necesitamos para ser más eficientes y estar más activos y motivados en las actividades que realizamos día a día.

Creando un espacio verde con sentido…s

Un primer paso a la hora de pensar en tener un espacio verde es entender que queremos lograr y a la vez cuál es ese valor agregado. Es aquí donde deben ir de la mano, el diseño, la estética y los servicios ambientales que brindará dicho lugar.

Con esto no estamos diciendo que las plantas exóticas y ornamentales que ya tienes o que estás pensando tener nos son las ideales o son malas, pues todo lo exótico no es invasivo o perjudicial, sin embargo sí queremos demostrar que es posible lograr un sano e importante equilibrio.

Afuera o adentro, luz plena o media sombra, con riego o sin riego, con flores sin flores, grandes o pequeñas.

El mercado está lleno de diversas especies de plantas, muchas están de moda por sus colores, la forma de sus hojas, su belleza sus bajos cuidados entre otros atributos, sin embargo, no todas cumplen un rol significativo en el ecosistema urbano.

Incluir en nuestras adquisiciones plantas nativas de la región en la que nos encontremos para vestir nuestro espacio verde, sin duda es un plus que nos traerá muchos beneficios.

¿A quién no le gustan los picaflores o las mariposas? ¿Las abejas y los abejorros?, o las vaquitas de San Antonio que traen buena suerte, Estos animales tan particulares son parte de la biodiversidad urbana pero a la vez son necesarios para sostener la vida en el planeta, ¿qué tienen en común? son polinizadores es decir que se encargan de trasladar el polen de un lugar a otro, logrando de esta manera la reproducción de las plantas y mejor aún la producción de diversos frutos indispensables para nuestra dieta alimenticia.

También nos generan sensación de bienestar pues al tener la oportunidad de tenerlos cerca y poder apreciar sus colores, su belleza, movimientos e interacciones, ayudan a disminuir el estrés y responder mejor frente a situaciones difíciles.

Para poder entonces tener estos beneficios, es importante ofrecerles un lugar que les aporte alimento y refugio, pero… ¿Cómo lo hacemos?

Acá algunos datos interesantes para incorporar a tu jardín nativo:

Para los picaflores recomendamos aquellas plantas con flores de formas tubulares que les permitan visitarlas y alimentarse algunas de ellas son la Salvia guaranítica o Canario rojo (Dicliptera squarrosa y tweediana). Por otro lado a la mayoría de las mariposas les agradan aquellas plantas con flores perfumadas y en las cuales puedan posarse y estar cómodas para poder libar el delicioso néctar, como por ejemplo la Lantana morada y también las que llamamos margaritas; pero es importante brindarles un lugar para su reproducción es decir que puedan depositar sus huevos, por eso para estos lepidópteros sugerimos sumar aquellas plantas que se denominan hospederas.

¿Que obtendremos entonces como recompensa cuando recreamos e imitamos el mundo natural en contextos urbanos?. La valiosa oportunidad de ver el rápido aleteo de los picaflores o todo el ciclo de la mariposa ¿lo recuerdan? huevo, oruga, pupa/crisálida y finalmente el adulto/imago

Es fantástico lograr todo esto con tan poco.